Ficha de Anne Minstrel

Anne Minstrel es la hija única de un entrenador y una mujer adinerada, ya fallecidos. Creció en la ciudad de Goldenrod, alejada del oficio de su padre, pero también de los negocios de su madre. A pesar de haber sido consentida, siempre trató de buscar su propio camino. Así es que, a los dieciocho años, dejó el hogar paterno para dedicarse de lleno a la pintura, viviendo modestamente en un pequeño apartamento que hacía a las veces de atelier. Logró una moderada fama, exponiendo sus obras en exposiciones menores de Johto. Un tema frecuente de sus obras eran las escenas de la vida cotidiana con figuras humanas y pokemons. Un dia, felizmente, quiso aprender a tocar el piano, percibiendo que su vida de artista corría el riesgo de caer en la rutina. Fue durante esas clases de piano que conocería a su futuro marido: un artista como ella, pero más centrado en sus objetivos que Anne, y lo suficientemente rico como para que sus padres  no objetaran  a la relación. Lo que empezó como un capricho de dos músicos acabó convirtiéndose en un sólido matrimonio del que nacieron dos hijos varones.
La señora Minstrel, ahora Schutz, invirtió todo su tiempo en la crianza de los pequeños, mientras su marido ganaba el pan con su música: ciertamente él había sido más exitoso que ella en cuanto a vender el arte que producía. Incapaz ya de dedicar tantas horas a la pintura por estar a disposición de sus niños, Anne incursionaría en la escritura, primero como un simple método de relajación, luego, como una vocación verdadera. Uno de sus borradores para una novela fue aceptado por un editor, y comenzó la prolífica carrera de Anne Schutz, autora pokemon. Abordó los géneros más diversos con un humor único, narración desenfadada y, como condimento esencial, la presencia de  pokemon. Hoy, recuerda estos años como la época dorada. Pocas cosas la habían preocupado durante estos años, y tanto ella como el señor Schutz eran artistas exitosos, sus hijos crecieron sin problemas y, llegado el tiempo, abandonaron el nido para buscar su propio destino.
Por desgracia, el señor Schutz llegaría a conocer uno sólo de sus nietos, antes de fallecer súbitamente de un ataque al corazón. Anne lloró amargamente su ida, mas esto no la detuvo. A ella nada podía detenerla: mucho había vivido ya. Después del duelo, retomó con ansias renovadas su carrera, y los críticos hablan de este segundo período de su vida como de la “etapa madura” de la autora. Adquirió fama en Johto como cuentista, sobretodo en los círculos literarios más especializados.
Como regalo de cumpleaños número 69, recibió de parte de uno de sus hijos un pokemon para mantenerle compañía: un Furfrou, su primer pokemon. Era el tipo de señales que la señora se tomaba muy en serio. Se despidió de su familia, que, consternada, la vio partir hacia regiones desconocida, acompañada únicamente por Fufó. ¿Sería capaz de iniciar un nuevo camino? Si, evidentemente. Para Anne Minstrel, la vida comienza a los 69 años.

No alcanzó gran fama como escritora para el público en general.
Casi siempre lleva a Fufó con el pelo natural.
A pesar de su edad, es tan competitiva como cuando tenía 20.